domingo, 17 de octubre de 2010

NIX


Cubierto con la cálida fineza de tu respiración acompasada me he entregado al febril abrazo de mi muerte diaria, suplico a Hypnos que me acoja en su lecho henchido por el peso de tu ausencia,por fín sé que mi sombra dormirá hoy en tu cama, jugando de nuevo al desencuentro furtivo, al susurro de te quieros y al beso tras una y otra puerta cerrada, así, a salvo, arropada no será sombra, será noche que imagine en la distancia. Y aún sin tí, mi dedo atrapado en la palma de tu mano dibuja caricias, ensueños,anhelos, miradas,... y mientras contigo, arrastro y empujo la emoción reencontrada, como Sísifo, pero empujando palabras, alientos, jadeos, que caen al llegar a la cima, allí donde acaba tu espalda, y reposo a tu lado, tú sin estar, y yo arropado solo con el olor que tu piel emana, desprotegido con tu recuerdo, desnudo en cuerpo y alma, ansioso esperando que Cronos te devuelva de nuevo a mi cama.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

MONTAÑAS DE YO, MI I TOP,GÓRY MOJEGO JA

Está ahogada la rabia, muerta, bien muerta, se ha encargado de hacerlo la extraña melancolía que me invade en estos dos días de estancia en el purgatorio, si antes tenía la extraña sensación de no haber vociferado lo suficiente, de haberme guardado esputos e insultos no dichos, de ganas de matar que al final, remitieron de la manera más tierna e infantil, han acabado sepultados bajo una burbuja, provocando su asfixia y por tanto defunción.
Ahora me habita una pena tan inmensa que solo pretende empujar al exterior el llanto acumulado durante tanto tiempo. He vagado desnudo, desprotegido de mantas, pieles y maquillajes, haciendo un esfuerzo enorme por no dejarme el alma en una tajada provocada por las cáscaras y los cartones, he vagado desnudo, mirandote a los ojos y haciendo un enorme esfuerzo por tapar mis vergüenzas y no mostrarme más vulnerable de lo que soy, he vagado desnudo inmerso en un sueño, entregado a la vida, y desafiante y desafiado me entregé a una rutina, cíclica y eterna, que por primera vez tuvo su auténtico fin antes de recibir el disparo final que provocase la caida sin red de esta mi "montaña de yo".No hay personaje, ¿hay teatro?, dudo, por lo que sufro y he vagado, por esta sensación de frío similar a la del fin de una ducha, ambos escalofrios son lo que me hacen pensar que hay alguien aguardando detrás de la cortina. Y ahora quien me dice que la función ha acabado,¿hubo función?, más bien parece que me enfrento ante la exposición de un testimonio vital, ofrecido en bandeja a un cortejo de comensales sin escrúpulos que aguardan comerse la amalgama formada por mi musculatura y mi sistema nervioso. Cómo decir entonces que esto fue espectáculo, ¿es que alguien quiere ver más?...
Gracias a que me he visto curado de mis cortes y arañazos por unas blancas manos pequeñas, frías e inocentes, que se enjuaban mi sangre en sus lágrimas, para desinfectar y purificar en un ritual de cariño y admiración que alimentaba mi desesperación y me daba fuerzas para continuar muriendo...
Hoy, que he intentado volver a vestirme, he sentido el escozor provocado por el roce de la piel sobre mi alma, y he decidido continuar en el mundo desnudo, vagando, automáta,con mis mismo miedos, tus mismos deseos y las mismas quejas esperando de nuevo el disparo final que me de la vida.
De aquí no me bajo.

martes, 17 de agosto de 2010

El sabor del trueno.


Cuando menos esperaba que algo me diese la tregua necesaria para tomar fuerzas de nuevo evitando cualquier tipo de purificación y ritual físico que depurase la apatía, el cielo, a 16 de agosto del año que pasa y cuenta, me ofrece la grata sorpresa de una tormenta de verano.
Que increible asociación de ideas y recuerdos me brinda el solo proceso del olfateo al saborear la tierra mojada, parece que de nuevo el chaparrón vuelve a empaparme desorientado a la salida de la escuela intentando llegar a casa, sorteando charcos y padres que arrancan de un tirón al resto de niños de la argamasa de mochilas y griterío, para salvaguardarlos en el coche; el resto, con una intensidad de velocidad retardada por el peso del agua, comenzamos una procesional carrera oscilante y caótica hacia el calor de nuestro habitual destino, que en esta ocasión, sin necesidad del juego teatral de la imaginación se torna en un confortable refugio a salvo del acecho del trueno.
Pero ya es tarde, e inevitablemente cada gota de agua que nos empapó, penetrando sin permiso alguno en nuestras alma, ha forjado una ensoñadora letanía que el paso implacable de los días, no ha conseguido borrar, al menos en mí, deseoso de tormentas de verano. Y ayer, y tal vez de nuevo hoy, me sorprenda felíz el relámpago, aguardando con una sonrisa inquietante el estallido de la nube que vuelve a romper en lluvia, que libre de culpas e inocente me entrego al día, con la pureza del llanto que amenaza, con la sensibilidad empapada que me persigue sin paraguas, con el "te quiero" olvidado que deseo arrancar de tu boca, con la certeza de que lo ha de venir, siempre será mejor, porque la lluvia se encargó de que así sea.

lunes, 9 de agosto de 2010

Teatro de sombras

No hizo falta leer ni un sólo indicador, ni mirar de nuevo el mapa, no hicieron falta horas y horas sentado frente al libro intentando memorizar datos, fotografias y nombres, sin apenas saber que la "eme" con la "a" se lee "ma", ni sumas, ni restas,...
Sin apenas saber orientarse, con la necesidad de otros ojos que miren por él, de fuertes brazos que lo empujen, de unos labios donde interpretar, ¡¡detente!!, fue mucho mejor su sabiduría y un tanto más extraño su desconocimiento, pero lo curioso, lo que me asombró, es, como pudo despertar la pena el reconocerlo a lo lejos, recortado en la puesta de sol, y se lo presentaba a su acompañante...
Los cementerios de cada pueblo, se pegan sobre el horizonte, idénticos, iguales, como un patrón de cipreses oscuros y murallas en sombra se hacen reconocibles a los ojos de cualquiera, aunque le cueste un gran esfuerzo escribir su nombre y saber porque pueblo acababa de pasar, en la despedida de su viaje se topó con uno a cada rodada de autobús, y la emoción de ver un deportivo blanco a gran velocidad, o un enorme camión cargado de ganado se mudaba en susurro al invitarlo a mirar el cementerio, como despidiéndose de cada ser querido que enterró, y yo cómplice de la soledad familiar en la que vive, lo escuchaba al otro lado, sin atreverme a mirar sus ojos llenos de acuosa pena, sin intentar decir nada para no romper ese momento en el que se proclamaba sabio por encima del mundo, el gran descubridor de la muerte, el eterno carente de caricias y palabras amables, errante, muerto en vida...
...Ah, lo vi, irse sólo, montado en el autobús que acababa de expulsar una amalgama de maletas, bienvenidas y preguntas, seguro que esa noche, le contó a cada rincón de la casa sola las experiencias amables de toda la semana.

miércoles, 28 de julio de 2010


Continúo con la duda de no saber si ya te escupí en la cara todo el odio que te tenía, hay cierta ligereza en mis acciones, más liviano me encamino a levantar del suelo tu sombra de despojos y restos, pero la cojera me recuerda donde recibí la patada, sigue pútrida la piel y corre riesgo de engangrenarse el único miembro que me quedaba sin tus ataques. Recojo tu mortaja, limpio tu vergüenza y la incinero junto a los demás recuerdos de abandono,(billetes de autobús sin disfrutar, fotos rasgadas donde justo estaba yo, desplantes de desayunos y ramos de flores rechazadas que se amontonan como en ofrendas ante el altar de la desesperanza)seguro que el humo reclama tu atención desde donde vuelvas a encontrarte, aún viviendo en este verano de alertas de incendios y olas de calor.
Sin apenas esfuerzo alguno, pero con todo el dolor que provoca reconocer que me hieres cuando me miras, acudo ciego, servil, a una nueva cita en la que escucharé de nuevo lo que me necesitas para segundos después seguir siendo sustituido por tu eterna sombra crecida por el egoismo de vuestras alabanzas continuadas, y tú, estúpida, pondrás cara de sorpresa gestada intentando hacerme creer, que todo el daño que me pretendes no es si no por mi apretada agenda y demás virtusismos y talentos que te impiden disfrutar de mi
de seguro que quien pierdes eres tú, mi idolatrada dama decoradora de agasajos y alabanzas y tu paquetito envuelto en crespón azul, tu talento y nuevo títere que ahora meneas con los golpes de tu inseguridad.
Yo ya agarré el incienso y lo prenderé en ofrenda a mi compañia, a tí, que os vaya bonito!!ya sabes porque espejo salir...

martes, 27 de julio de 2010

De noches, sueños y caricias.


En la curiosa mecida de tu abrazo maternal intentabas adormecerme, carente del afecto necesario que me calmase y me llevase de la mano de Morfeo a las sabias piedras de Delfos, como conseguir realizar este viaje sin que tu aliento me provocase el sueño que el dios exige como pago para cruzar hasta el otro lado a salvo de la acechante barca de Caronte, como convencerte de que sin despertar en ti ese atisbo de soniquete que repite la nana, como concienciarte de que solo en tu prensencia, la manta que me cubre deja de ser el escudo que de niño me protegía para conventirse en la mano complice que nos acoge, dejando el pudor al lado de calzoncillos, camisetas, jadeos y sudores.
Es solo en la curiosa mecida de tu abrazo maternal donde las Moiras, dejan a la Noche que me haga dormir en paz, alejando pesadillas y abrazandome a tu sonrisa.

lunes, 26 de julio de 2010

Una musa dentro de un huevo

Ah, por cierto, gracias, tras esta temporada silenciado, vuelve a quebrasrse uno de esos huevos que formaban mi "Montaña de YO", dejando salir un placentero sentimiento se soledad necesario para afrontar lo que queda de verano, ahora la satisfacción va llenándome con la emoción de lo nuevo que me tocará vivir, una nueva maleta llena de ganas que por primera vez saldrá vacía de recuerdos y enseres para llenarse de tus miedos y dudas que tanto me crispan, un circuito de representaciones en Polonia, y dos meses de vida en México, ya hablaremos,...

galletas de la fortuna

Por dos veces, el azar, con cierto tiempo de ingesta de una a otra, la galleta volvió a repetir lo mismo, la armonía es vital para tí, dos veces la misma frase,...
Curioso el azar, siempre lo ha sido, vuelve a intentar aportar una armonía desaparecída, tú, en tu inquietante búsqueda de placeres y caricias furtivas, te encontraste con mis ganas de abrazarte, pero no me conocías, y yo, que en estos últimos meses me entregé adolescente al deseo de la conquista y el cortejo, te reconozco tras el agua, ahí, me miras, intentas conocerme sin saber que ya lo hicimos, y vuelvo a tragarme las ganas de volver a mirarte a los ojos diciéndote lo que provocas en mí. Ahora quiero jugar, llevarte a un mundo de onirismo mitólogico en el que la sabiduría de la experiencia lleve de la mano a tu inocencia y juventud. Sin tu saberlo, he vuelto a regalarte un rincón en mi vida, donde regalarte lo que mejor se, mi sinceridad y dedicación a través de mis palabras, espero quieras escucharlas, y no hagas como Edipo con Tiresias.

martes, 20 de abril de 2010

LLAMANDO A LAS MUSAS.

Ya se de lo utópico del quejarse por la falta de inspiración, que cruelmente elimina las palabras, imágenes y "te quieros" varios de nuestros días, pero que hacer cuando tal desgana te posee de manera tan embrutecida que lo único que pides es silencio...
... Silencio a gritos, soledad, hasta incomprensión si fuese necesario, sin apenas tener que discutir, sin que nadie me de la razón, solo con la satisfación de creer a ciencia cierta que soy yo quien la tiene, y evitando que me hablen de egoismo, va mas allá, intenta llegar al centro mismo de las cosas para acomodarse allí y no salir, para cerrarse en ese sentimiento positivo que intentan desvanecer todos con su sabiduría aplastante y absurda que es la que verdaderamente me obliga a enmudecer intencionadamente.
Cada vez necesito más estar sólo, equivocarme en mis decisiones sin tener que dar ninguna explicación, conformarme solo con mi propio "lo sabía" y llorar, llorar amargamente como hace años que no hago. Será porque dejé de escuchar tus canciones, será por eso que apenas quiero escribir...O tal vez quieren enmudecerme?.

viernes, 19 de febrero de 2010

DÍA Y MUERTE DE UNA APATÍA

Un golpe de aire.
El agua.
Frío, escalofríos, temblor.
Y luz, por fin, luz.
Nueve horas ciego, nueve meses.
Día tras día, nueve horas.
Algunas veces siete meses, no siempre.
A rastras, intentando mantenerme en pie, despacio y aprendiendo a hacerlo todo bien salgo forzado de esta casa, desprotegido del confort amniótico y oscuro del que he estado alimentado, me obligo a respirar…
…¡ese golpe de aire!
Veinticuatro horas, ¿ochenta años?.
Una rutina arraigada de costumbres y quehaceres que por muchos minutos que pasen no consigo desaprender. Mecánico, igual, aburrido.
¿Ochenta años? No, por ahora treinta y uno avanzando en bloques de veinticuatro horas hasta no sé cuando.
Olvido los sabores, los colores, las formas; pierdo las formas, y te falto al respeto con la rebeldía propia de mi adolescente insurrecto. Sigo deambulando bruscamente, alargando este parto matutino con cesárea, con dificultad de alumbramiento.
Me sonrío, busco acelerado y nervioso tu complicidad, y no la encuentro por más que la busco una y otra vez y caigo rendido, imagino tu sexo creciendo mientras toco mi sexo que también crece, te huelo, te recuerdo aquí, sudando, buscándome la boca desde atrás para morderme, te muerdo.
Te imagino boca a boca robándome el aire, quitándome el dolor, exhalando placer, gimiendo, mientras me masturbo absorbido por el colchón con la emoción silenciada para no agrietar más la pared.
Me aprieto fuerte despacio, lento me acaricio, paro por si viene alguien y me pilla, seguro de que nadie me oye sigo hasta que me voy, me entrego al abandono de la respiración relajada, del cansancio y me vence el sueño.
De una manera extraña despierto a tu lado, tu duermes, y yo me desperezo con dolor, aquejado del achaque de los minutos sobre mis hueso, me enderezo y salgo a poner los relojes en hora, no puedo perder tiempo.
A la vuelta y desde la puerta de la habitación veo como te deshaces, te esfumas igual de rápido que viniste a mi recuerdo y continuo con mi ceremonia de iniciación al matrimonio quitando tus pelos del lavabo, por cierto duran más que tus besos.
Suena una alarma, ya puedo mirarme al espejo, hasta esta hora no suelo hacerlo para evitar verme de niño, a esta hora nunca veo mis ojeras, siempre aparece mi reflejo de espaldas y así compruebo como tengo de largo el pelo, mañana me lo cortaré, siempre es bueno tener una buena imagen para empezar el año.
Me ducho, hago una reflexión mental de cómo fue la jornada para que el agua se lleve lo que más me gustó y quedarme con los peores momentos, así no volveré a repetirlos. Salgo con cuidado de no volver a resbalar, con estas horas el cuerpo no responde igual.
Cuando me quito el albornoz, seco, te pido ayuda para que me pongas el sudario, me amortajes y por fin dirigirme, a oscuras y ya sin tu ayuda hacia mi lecho, seguro de que hoy pasaré una buena muerte y mañana el parto será más corto.