De la gama de grises de la tarde que pasamos juntos me quedaría con el blanco...
... a bocanadas y a manos llenas, el blanco luminoso que irradiaba tu respiración,tranquila como la de quien duerme, el blanco de las sabanas oreadas en el patio, el blanco del azahar,... el blanco y su olor.
No consigo recordar cuantas tardes así vivimos, y a duras penas intento confirmar si vivimos alguna o en realidad es el deseo intenso de que un momento así suceda.
Protegidos como la blancura de la nube que aislada de las demás, se muestra henchida y segura, como si iniciase una danza encriptada girando sobre sí misma, agarrada a la balaustrada desde la que, afortunada puede contemplar nuestro deambular, el de dos transeuntes perdidos en una tarde de tonos grises en la que el cese de la lluvia nos dejó amarnos...

la cuenta atrás(episodio II)

... sin volver la vista atrás se encaminó seguro con la firme decisión de no volver a caer en la trampa, si el destino había decidido llegar a ese punto cumbre de la ruptura nada habría que pudiera detenerlo, sabía perfectamente como se las gastaba, el destino, no él.
cuando las miradas llegaron a sustituir las palabras, y el rostro abierto al fácil lenguaje de la emoción, pudo comprender que se estaban amasando en una confianza digna de las mejores de las amistades, como las de la niñez. Y a la par se calzaron las botas que marcarían una caminada con ritmo y fuerza, dejando huella, la suerte estaba echada, la defensa ante cualquier ataque era irremediable, no había dudas, el primer nombre en aparecer por la mente era el suyo, capaz de solucionar cualquier problema, y de plantar oidos a las quejas y lamentos de una mala y desafortunada tarde de verano, pero ciego, fue dejando guiar sus pasos con una intuición fallida que no vino sino a demostrar la duda que "las parcas" fueron incrementando por lo cotidiano de su entusiasmo, hasta un punto tal, que la sombra de la tormenta se fue ciñendo sobre él, robando su color y energía para irse apagando y tomar una decisión...

Dudas

de repente, y tan subitamente como la inspiración del susto, me he visto asaltado por un millar de dudas imposibles de controlar, fuera de sí, preocupadas unicamente de acorralarme para no tener tiempo de pensar y disiparlas, que juego más sucio el de estas dudas, y yo que crei sobreponerme cada vez que una de ellas se me paseaba por delante impidiendo mi reposo y concentración, y claro,así todas juntas, cualquiera las evita, no encuentro solución, intento ordenarlas por orden alfabético para matarlas poco a poco, pero es dificil, porque alguna que otra vez se camuflan unas dentro de otras haciendolas crecer hast formarse invencibles.....
.... ah y para colmo se confabulan con una mala tarde de primavera de esas lluviosas sin venir al caso pero que te arruinan lo que podía ser una preciosa tarde de cafés con algún amigo. Igual es que la lluvia quiere evitar que de este paso por algo, quizás sea el agua la ayuda para borrarlas saciándolas en su sed de venganza y golpe de estado en mi animo, no se, voy a probar y saldré a tomar un café, veremos a ver que pasa...